Ya estamos en el quinto día de los preparativos antes de la fiesta.
Hoy vamos a tratar de ver cómo responder a estos sentimientos y signos de ruptura, a esta realidad que reconocemos en el mundo, en nuestro ser, de ir contra la armonía, ir contra la unidad, con nuestros gestos, con nuestras elecciones y me pregunto y te pregunto ¿qué sientes? ¿qué quieres hacer con ellos? ¿Te sientes invitado a responder?
Francisco Palau decía que el amor no puede estar ocioso en el corazón del hombre. Si me siento amado y siento deseo de amar no queda otra que salir al encuentro.
Salir al encuentro para derribar los muros, para curar, para rehacer las relaciones, para encontrarme. Relaciones conmigo mismo, relaciones con el otro, y la manera que veremos en Francisco y también en la encíclica sería lo encarnado, gestos de cercanía, de ternura, gestos de amor. El papa recuerda que “una ecología integral también está hecha de simples gestos cotidianos donde rompemos la lógica de la violencia, del aprovechamiento, del egoísmo”.
También la eucaristía como un signo del amor y una realidad mística de comunión; curar relaciones en la sociedad, sanar y echar demonios, buscar que puedo hacer …comprometerme.
Por eso, hoy te invito: mira cómo crear los vínculos, las relaciones, y re-crearlas allá donde estén dañadas. Mira con ternura al otro. Déjate mirar con amor y acoge el don de la fraternidad. Cuida las relaciones contigo mismo, con el otro, con la naturaleza y con Dios.
Y si quieres profundizar un poco más sobre estos contenidos, sobre la persona y la actualidad del mensaje palautiano, entra en nuestra página web europa.cmtpalau.org y lee la publicación preparada para hoy.
“El amor no puede estar ocioso en el hombre” (MR, 15,1)
“Es posible volver a ampliar la mirada, la libertad humana es capaz de limitar la técnica, orientarla y colocarla al servicio de otro tipo de progreso más sano, más humano, más social, más integral” (n. 112)