A través del Newsletter de la Delegación San Lorenzo Ruiz – Asia – nos llega la voz de Bless, carmelita misionera teresiana. Comparte el impacto de la lectura de los testimonios que han ido apareciendo en nuestra página. Testimonios de dolor, de mucho dolor, y de lucha contra la trata de las personas. Y sobre todo, agradece la implicación, también con un poema.
Cuando las hermanas empezaron a dar sus testimonios sobre la Trata en las Personas, el término moderno de las esclavitud, comencé a leer los artículos, mirar las noticias y ver cada vez más imagenes que me ayudasen a entender mejor qué mis hermanas estaban contando.
La trata de personas era para mí una realidad de la que no era muy consciente. Es muy difícil creer que es real, que realmente ocurre, que este MAL existe. ¿Cómo comparar el valor y la dignidad de las personas a cualquier cantidad de dinero? ¿Por qué permitimos que nuestros corazones se vuelvan tan duros? ¿Por qué explotamos, tiranizamos, manipulamos y abusamos la vulnerabilidad de los demás por el interes propio? ¿Por qué de tanto mal?
Aunque este mundo no es familiar para mí, no puedo pasar de largo. Yo busqué ser madre, hermana o tía para esos cientos, miles y miliones de niños, jóvenes y adultos llorando a causa de dolor, gritando por ayuda, respirando por vida y luchando por libertad.
Sueño con abrazarles con mis brazos, con susurrarles palabras de ánimo, me gustaría unirme y compartir sus miserias, sus esperanzas y decirles que el amor existe y que Dios existe. “El amor todo lo hace posible” (MR 9,29), la comunión lo hará posible. Mi pobre y simple oración les alcanzará.
Reconozco que Dios ensancha mi corazón para acoger este Cuerpo de la Iglesia, llagado y roto. Él despierta mi espíritu para formar parte de este proceso de liberación, aunque sea de una manera humilde.
A todas mis hermanas y los laicos quienes tuvieron una implicación directa en nuestra opción en contra de la Trata:
Gracias por no dar la espalda.
Gracias por no ser cobardes,
Por vuestra firmeza,
Por defender la verdad,
Y luchar por la justicia,
Incluso al precio de ir contra corriente y pasar por un túnel oscuro.
Gracias por confiar en Dios
Y el movimiento de su Espíritu
Que sostiene y guía.
Gracias por permitir a Dios
Haceros parte
De su plan de liberación
De miles de niños, jóvenes
Y adultos.
Gracias por no guardar vuestra profunda experiencia de la Iglesia para vosotros.
Gracias por proclamarnos
Para que encendamos de nuevo nuestro compromiso,
Nuestra pasión misionera
Y por recordarnos que “vivimos y viviremos por la Iglesia, vivimos y moriremos por ella”
HNA. BLESS LLAVE, CMT
Bless Collado Llave – Carmelita Misionera Teresiana, filipina, de 40 años de edad y 13 de votos. Ha estado destinada en las cuatro comunidades de la Delegación de Asia y en Zaragoza, comunidad Edith Stain. En España supo ‘beber’ del carisma, asumiéndolo en su vida.
Es una mujer apasionada y soñadora; le gustan las cosas bien hechas. En comunidad disfruta cuando hay vida de ‘familia’ entre las hermanas.
Actualmente se encuentra destinada en la comunidad de Manila.
