COLEGIO LA PURÍSIMA – CALLOSA DE SEGURA

CARMELITAS MISIONERAS TERESIANAS

Jordi Rodríguez y M. Carmen Mas Fuentes el 12 julio, 2018

Un día de junio, hace ya más de diez años, colgamos en el despacho de dirección la cita de John Dewey “Si enseñamos a los alumnos de hoy como enseñamos ayer, les estamos robando el futuro” y nos embarcamos en un viaje sin retorno hacia la transformación de un centro, cuya identidad ya formaba parte de la esencia de todos que zarpamos ese día. No nos costó decidirnos, ya que iniciábamos una aventura bajo el amparo de un colegio con más de 125 años de servicio educativo perteneciente a una congregación centenaria con unos referentes ampliamente arraigados en la misión y el cambio. Como muchos antes que nosotros y otros tantos que se enrolarán después en los navíos de sus colegios, comenzamos nuestra travesía cargados de ideas, ilusión y entusiasmo, pero sin un rumbo estable que nos orientase. Durante años, nos especializamos en calidad EFQM, ordenamos nuestros procesos y equipos, trabajamos proyectos, marcamos iniciativas de cambio, viajamos a muchísimos colegios para compartir propuestas de cambios… y aprendimos mucho, de todos. Lo habíamos logrado: todos los profesores estábamos fuera de nuestras respectivas zonas de confort y el colegio iniciado en el cambio al convencernos de la necesidad de una educación diferente. Lo más difícil estaba hecho, estábamos en el camino del cambio… pero sin fijar rumbo.

HACIA UNA INNOVACIÓN REAL Y EFICAZ
RETROCEDER PARA AVANZAR

La reflexión y el análisis forman parte de cualquier cambio y, tras años de travesía indagando en fórmulas que nos acercaban al cambio educativo desde diversas aristas, todas enriquecedoras, pero todas diferentes, decimos parar. Descubrimos que estábamos preparados para poder guiar nuestro cambio y recurrimos a la introspección en el carisma CMT de nuestra misión educativa para marcar unas líneas maestras. Dar un paso hacia atrás para dar sentido al cambio. Marcamos que la educación integral de nuestros alumnos, el seguimiento, la atención personalizada y la preparación para la vida, para el hoy, debían ser las vías que acotarían nuestro viaje y nos asegurarían la eficacia del cambio.

INNOVAR CON CRITERIO: TOMA DE DECISIONES Y ACTIVACIÓN

Contar con una base sólida cimentada en nuestra esencia nos hacía sentir fortalecidos, preparados para afrontar un cambio con criterio. Un sustrato sólido nos aseguraba avanzar sin perder coherencia y nos hacía sentirnos preparados para ordenar cambios e impulsar nuestro proyecto. Reorientamos el trabajo con una estructura de equipos horizontal y relacional con responsabilidad y capacidad de liderar iniciativas desde la ilusión y el compromiso.

Estábamos preparados para marcar vías que uniesen nuestra formación anterior con nuestra identidad para convertirse en las marcas de concreción de nuestro proyecto. Consideramos que nuestro cambio debería fundamentarse en cuatro pilares básicos:

  1. Aprendizaje significativo. Adoptamos la idea de Ausubel como estandarte de cambio para adentrarnos en una escuela fundamentada en el ser, no en el hacer. La escuela del pasado, fundamentada en un modelo industrial ha tenido su etapa, más bien larga, pero no se corresponde con lo que necesitan nuestros estudiantes hoy.
  2. Cambio de rol profesor facilitador-alumno protagonista de su propio aprendizaje. Con un claustro dispuesto, ubicado en la zona de los retos, afrontamos este desafío con convicción y cambiamos la idea preconcebida de educación unilateral, en la que un profesor imparte clases magistrales a un alumnado pasivo.
  3. Aprendizaje cooperativo, que garantizase nuestra idea de educación inclusiva. Partimos de los preceptos de Pere Pujolàs y nos adentramos en este tipo de trabajo hasta convertirlo en un puntal de nuestro modelo educativo.
  4. La competencia digital, no como herramienta accesoria, sino como conexión con nuestros alumnos: si lo que ocurre en el aula no tiene relación con su realidad, no podremos aportarles lo que necesitan para enfrentarse al mundo que les espera.
MODELO COHESIONADOR

Con nuestras aulas inmersas en una idea de educación bidireccional, significativa, inclusiva, creativa, plenamente enfocada hacia una escuela del ser, pensamos en dar un paso definitivo para conseguir que todos los cambios pudiesen dar forma a un modelo educativo concreto que nos representase y que impulsase un aprendizaje enraizado desde el pensamiento. Bajo esta premisa, contactamos con el modelo VESS “Vida Equilibrada con Sentido y Sabiduría”, que ha dado sentido y equilibro a todo nuestro proyecto y ha revolucionado el trabajo en nuestras aulas. Profesores y alumnos plantean el aprendizaje desde los preceptos VESS, con los que nos identificamos, y, en nuestro colegio, está plenamente implementada una cultura de pensamiento, que ha llegado para quedarse

 

MÁS QUE CAMBIO, TRANSFORMACIÓN

 Transformación tiene el sufijo trans- que indica ‘de un sitio a otro’, ‘el cambio de una forma a otra’. La raíz latina forma significa ‘figura’ o ‘imagen’ y el sufijo –ción acción’ y ‘efecto de’. Entonces, transformación vendría a ser ‘la acción o el efecto de cambio” y a eso nos llevó la implementación del modelo VESS. Estábamos plenamente capacitados para abarcar un proyecto de transformación que implicó los espacios, con las primeras obras siguiendo la idea de apertura que favoreciera la visibilidad del pensamiento; un modelo innovador pedagógico; una formación continua desde un equipo interno del propio centro y la posibilidad de llevar al siguiente nivel nuestra idea de proyecto de innovación TIC.

Del interior de este proyecto de transformación surgió el Proyecto Mochila Digital La Purísima Callosa de Segura que, enmarcado dentro los cuatro pilares educativos del colegio y, al amparo del pensamiento como estrategia pedagógica marcado por el VESS, ha supuesto un gran impacto en el aprendizaje de nuestros alumnos. Una iniciativa de trabajo con Ipads según la modalidad One To One que ha impulsado el aprendizaje autónomo y el protagonismo de unos alumnos ya asentados en el empleo de hábitos y rutinas de pensamiento. Sin duda, ha superado todas nuestras expectativas, los alumnos generan su propio material, modelan dinámicas, graban rutinas de pensamiento, conclusiones y conectan su aprendizaje con su realidad diaria en la que la tecnología ocupa un lugar muy relevante.

NECESITAMOS A LOS PADRES

Teniendo a pleno rendimiento un proyecto de transformación adaptado a nuestra realidad, nos dimos cuenta de que no solo era importante que los padres asumiesen el proyecto y lo valorasen, necesitábamos que pudieran vivenciarlo para que fuesen parte activa de ese proceso de transformación. Era la pata de la mesa que faltaba, fuimos conscientes de ello y no podíamos obviarlo. Por esa razón, lanzamos la iniciativa Café para padres, que debía servir para que los padres experimentasen personalmente nuestro modelo educativo. Invitamos a un grupo de padres y pudieron trabajar contenidos del mismo modo que hacen sus hijos; la experiencia fue extraordinaria. Sin embargo, aún cabía dar un paso más y, en un Café posterior, sumamos una experiencia matinal en el aula en la que presenciaron una rutina en directo con el trabajo de un contenido curricular sincrónico para posteriormente trasladarlos en una sesión vespertina a una experiencia similar protagonizada y modelada por sus propios hijos. El resultado fue aún mejor que el anterior y no solo sirvió para que sintiesen nuestro modelo como propio, sino para conectar las realidades de colegio, padres y alumnos.

Estas experiencias se han convertido en uno de los intangibles más potentes del colegio y ya se han realizado diferentes cafés en EI, EP y ESO. La tendencia, dada su positiva repercusión en el fortalecimiento de la idea de educación como tarea compartida, nos lleva hacia la generalización de la iniciativa en la programación anual de nuestro colegio.

ABRIMOS NUESTRAS PUERTAS…  

Durante años, visitamos otros colegios, que nos acogieron y de los que aprendimos mucho. En los últimos años, sin embargo, somos nosotros los estamos teniendo la posibilidad de abrir nuestras puertas a colegios de nuestra congregación y ajenos a la misma, que visitan con frecuencia nuestras aulas para acercarse a nuestro proyecto de transformación. El colegio está abierto y todas las visitas suponen un enriquecimiento para nuestro proyecto, todas nos aportan y empoderan a nuestros alumnos, al claustro y al equipo de innovación. Nuestros equipos siguen desplazándose a otros centros y congresos para conocer nuevas iniciativas, pero ahora también nos enriquecemos con la presencia en nuestras clases de docentes interesados en conocer nuestro modelo.

… Y PROYECTAMOS NUESTRO COLEGIO 

Nuestro proyecto demandaba salir del colegio y abrirse a otros espacios. Tanto nuestro equipo como nuestros alumnos estaban preparados para ello y nos decidimos a participar activamente en el III Ateneo Internacional VESS. Nuestros profesores, Jordi Rodríguez Pérez, M.Carmen Mas Fuentes y Luis Manchón Torres protagonizaron ponencias en las que mostraron diferentes aspectos del modelo pedagógico del colegio. Este paso tuvo su continuidad con la candidatura a los Premios de Innovación Educativa, organizados por SchoolMars y EIM Consultores.

Y llegó el momento de nuestros alumnos. Ante la demanda de otros colegios que tenían interés en comprobar cómo se trabaja con Ipads un modelo de aprendizaje fundamentado en el pensamiento, la empresa MediaMarkt gestionó un evento en sus instalaciones para que nuestros alumnos pudieran ofrecer una experiencia en vivo al resto de colegios que habían mostrado interés en ello. Resultó todo un éxito y ello nos animó a presentar una candidatura al SIMO para exponer una ponencia taller en su edición de 2018 y que otros colegios, docentes o interesados pudieran comprobar cómo trabajan nuestros estudiantes, al tiempo que los alumnos adquieren nuevas destrezas comunicativas. 

NUESTRA MAYOR FORTALEZA, NUESTRA IDENTIDAD.

Con este recorrido, hemos pretendido esbozar algunos rasgos relevantes en nuestro periplo innovador y nos atrevemos a afirmar que, para nosotros, el factor diferenciador ha radicado en la consciencia de lo que somos y de dónde venimos para poder afrontar decisiones e incertidumbres con la certeza de actuar con criterio.

EQUIPO, EQUIPO, EQUIPO.

Explicitando las claves del cambio, el nuestro tiene clave humana y puede sintetizarse en un sustantivo: equipo. El primero de ellos, el equipo directivo con nuestras titulares a la cabeza, valientes, entregadas, ejemplo y espejo de misión, visión y valores. El impulso, el respaldo y la orientación de las titulares de nuestro colegio han resultado vitales para el desarrollo del proyecto. El segundo, el equipo de innovación que, trabajando codo con codo con el equipo directivo, ha sido capaz de convertir cada desafío que pudiera aparecer en ilusionantes oportunidades que fortaleciesen nuestra trasformación. El último, el verdadero motor de cambio, nuestro equipo docente, resiliente, convencido de su compromiso con el futuro de los alumnos, dispuesto a abandonar su zona de confort cada año antes de haber adquirido una nueva. Contar con un claustro implicado es sinónimo de éxito. 

¡ESTO NO PARA!

 Si de algo estamos completamente convencidos es de que la apuesta por la innovación educativa está en continuo movimiento y que la misión por ir más allá, por adecuarnos a la realidad y las necesidades de la educación de nuestros estudiantes, no tiene culmen posible. Desde nuestro equipo preparamos nuestras formaciones que concretizan en la realidad de nuestro colegio las ideas que proceden del exterior. A nuestra preparación en aprendizaje significativo, cooperativo, herramientas de pensamiento, modelo VESS, formación TIC e implementación de Ipads; ahora sumamos la incorporación del Flipped Classroom y la Gamificación, que estamos convencidos permitirán optimizar y potenciar nuestro actual modelo pedagógico.

Apoyados en nuestra vocación innovadora procedente de una identidad centenaria, nos sentimos preparados, capaces e ilusionados para continuar afrontando retos.

¡Seguimos!