Como Carmelitas Misioneras Teresianas y como Iglesia, compartimos con gozo las vivencias de la comunidad de El Vendrell y de la familia de Marisa en su incorporación a nuestra familia. Damos gracias a Dios por el SÍ valiente y seguimos pidiendo por los jóvenes para que estén abiertos a la llamada del Señor.
ENTRADA AL POSTULANTADO DE
MARISSA ALMEIDA
Festividad de Santa Teresa de Jesús
Como cada año, el día 15 de octubre es un día especial en todo el Carmelo, pero este año, en la comunidad del “Sagrat Cor” de El Vendrell ha tenido un matiz muy especial.
En el tiempo en que vivimos ahora, que parece que ya nadie desea seguir a Jesús, es un gran motivo de alegría, agradecimiento y alabanza a Dios porque sigue llamando a jóvenes a la Vida Consagrada, a seguir a Jesús y su Evangelio.
La fiesta empezó el viernes por la tarde cuando Marisa, desde Portugal, junto con su madre y la Hna. Sayo llegaron a la comunidad. Por la noche llegan también la hermana de Marisa y tres amigas que también querían participar de este momento tan significativo.
El día amaneció lleno de ilusión, emociones y esperanzas por todo lo que se celebraba, también con música tempranera de “Gralles” y tambores por coincidir con la “ Fira de Santa Teresa” en el pueblo.
La mañana fue de preparación, entre todas, para el momento de la celebración.
Llegada la hora, ya todas en la capilla, cuidadosamente adornada y con significado, estábamos dispuestas, con mucha ilusión, emoción y gozo a acompañar a Marisa en el acto de su inicio al Postulantado.
El encuentro fue preparado con mucho detalle y muy significativo en todo momento por una Hna. De la comunidad. Los cantos muy bien elegidos y ensayados para el momento.
En cada parte de la celebración había una monición explicando lo que correspondía a cada momento: la Hna. Sayo entrega a Marisa el Plan de Formación. Oración de intercesión por Marisa, por Hna. Olga que le acompañará en este camino, por su familia, amigas y la comunidad. Al final, precedido de un canto a la Virgen, la Hna. Olga le entrega la medalla del Escapulario.
Decir que todo este momento fue muy emotivo y que el boli no puede expresar lo que sucedió en cada corazón. Hubo momentos que esas lágrimas de emoción, sentimientos y alegría regaban los rostros como queriendo acariciar todo lo que había dentro de los corazones.
Sólo queda dar gracias a Dios por el regalo de poder vivir estos momentos tan entrañables, mirarle a Él y dejarnos mirar por Él.
No dudamos que toda la emoción y sentimientos de cada una fueron recogidas por Jesús de Nazaret, con gran delicadeza y que un día nos llamó también a nosotras para seguirle como lo ha hecho con Marisa.
Junto con Marisa damos gracias a Dios por el gran regalo que nos ha dado a nuestra Congregación.
La Comunidad
15 de octubre de 2022
Festividad de Santa Teresa de Jesús
El Vendrell.
