Recién profesa fue destinada a varias comunidades, recordando ahora las más cercanas (Tarragona, Les Borjes del Camp, El Vendrell). Pero uno de sus destinos fue Valls, en la antigua Residencia, donde destacó su amor a la Obra de la Congregación siguiendo el espíritu de Ntro. Padre Fundador, el servicio a Dios y los prójimos,
Este cuidado no solo le hizo en casa también atendía a las jóvenes trabajadoras que acudían a la Comunidad y el cuidado a los enfermos en su domicilio. De este su gesto acogedor y bondadoso todavía lo recuerdan tantas personas de nuestra ciudad y que hoy nos acompañan con su oración para nuestra Hna.
Después de muchos años ella de nuevo es destinada a Valls en nuestra Rcia. Santa Teresa, en ese momento no con la vitalidad e ilusión de antes sino de una persona con su salud gastada y necesitada de todos aquellos cuidados de los que ella tanto prodigo durante aquellos años de su vida joven.
Para nosotras ha sido un ejemplo de paz, de bondad, de aceptación a la voluntad de Dios, y con esta misma paz fue su traspaso hasta su encuentro definitivo con el Señor y Ntra. Stma. Madre del Carmen.
Hoy queremos dar gracias al Señor por este don de la vida de nuestra querida Hna. Celerina y lo hacemos por medio de esta Eucaristía.
Hna. Celerina descansa en Paz.
