PINCELADAS DE JUANA BASTERRECHEA CARMELITA MISIONERA TERESIANA

Hacer memoria agradecida de nuestra hermana Juana Basterrechea es mantener viva la memoria de una vida desgastada por amor hasta el final; es semilla que cae en tierra y muere para ser nutriente y que la tierra sea fecunda.

Juana nace un 20 de junio de 1940 en Usansolo (Bizkaia) en el seno de una familia numerosa. Ingresa en la Congregación de Carmelitas Misioneras Teresianas en mayo de 1959 profesando el 15 de mayo de 1961.

Formada en enfermería, su misión apostólica siempre estuvo vinculada al mundo del enfermo, del anciano, del dolor y el sufrimiento. Dejó parte de su vida en distintos sitios entre los que destacamos Barcelona, Montpellier, Huesca, Palma de Mallorca, Bilbao.

Quienes la conocieron en su plenitud de vida, dicen de ella que fue una enfermera excelente, muy entregada al enfermo; querida por todo el personal que trabajaba con ella y, que, en muchas ocasiones, estuvo bajo su supervisión. Era una mujer muy caritativa y en la vida de comunidad era un ángel, dándose en todo sin hacerse notar.

Desde el año 2017 se encontraba en la comunidad de Irun. Aquí su salud se fue deteriorando inexorablemente. Fue una lucha exterior e interior por salir adelante, sobreponerse, vivir. Ha sido una enferma de trato fácil y agradable, comprensiva, cariñosa y sufrida.

Juana era una mujer luchadora, con mucha fortaleza. Se enfrentó en la mitad de su vida a un cáncer de páncreas que superó siendo durante casi 25 años una superviviente, aferrada a la vida hasta el último suspiro, afrontando los últimos momentos sin paliativos, luchando hasta el final y dejándose en manos de nuestra Madre, la Virgen del Carmen en silencio, sin ruido, calladamente.

Con el enfermo, desde el enfermo y para el enfermo con la Madre de Dios, a quien rezaba rosarios por todos y, como no podía ser de otra manera, la víspera de la Virgen de Lourdes con el rosario en la mano se marchó. Entregó su vida a Dios en la Comunidad Santa Teresa de irún el día 10 de febrero del 2022.

Descansa en lal Paz de Señor, H. Juana.