“EL SEÑOR ES MI PASTOR, NADA ME FALTA”, son las palabras que en este momento podríamos estar escuchando, de labios de H. Mª Teresa.  Ella, que ya se encuentra gozando de todo aquello que el Señor tiene preparado para los que le aman.

Hna. Mª Teresa nació en Castilfalé (León), el día 13 de julio de 1939, en el seno de una familia muy cristiana, que hasta el día de hoy ha regalado a la Iglesia tres de sus hijas. Dos de ellas son Carmelitas Descalzas en el Carmelo de Ciudad Real. Ella decidió seguir al Señor en nuestra Congregación de Carmelitas Misioneras Teresianas. Hizo su Profesión Religiosa el día 15 de mayo de 1968.

Dispuesta siempre a seguir la voluntad de Dios a través de los superiores, se preparó responsablemente en el Campo de la Sanidad, para llevar a cabo la Misión al servicio de los hermanos en el Mali (Africa) con total entrega, en un medio musulmán, acogiendo a todos y ofreciéndoles toda la ayuda que estaba a su alcance. Más tarde pasó por las comunidades de Zamora y Barcelona. Son muchas las personas que le recuerdan como una persona prudente, siempre disponible y solícita para el servicio.

Hna. Mª Teresa se sintió afectada por graves enfermedades que la fueron minando las fuerzas físicas. Así llegó a nuestra comunidad donde hemos tenido ocasión, de disfrutar de su compañía y de ayudarle a llevar sus dolencias, lo mejor posible, con la estima y aprecio que se merecía, a lo largo de los cuatro últimos años de su vida.

En estos momentos sus  hermanas y  familia se merecen, por nuestra parte, un especial recuerdo de gratitud  por la compañía y el cariño que la han prodigado hasta los últimos momentos. Pedimos al Señor que les consuele y fortalezca en estos momentos.

La Hna. Mª Teresa fue un alma misionera de gran talla, que supo regalar su riqueza humana y espiritual a todos, sin tener en cuenta religión, raza o color, todos eran recibidos por ella con el mismo interés, cariño y atención.

Hoy nos gozamos y damos gracias a Dios por esta hermana nuestra, Carmelita Misionera Teresiana, hija de la Iglesia,  a la que siempre sirvió y no sólo,  en tierras africanas, donde sólo la fe y la confianza en el Señor, la mantuvieron fuertemente unida a Él, a quien había ofrecido su vida.

Descansó en el Señor el día 27 de marzo del 2022 en al comunidad P. Francisco Palau de Tarragona,  CASA MADRE.

Con palabras de Santa Teresita H. Mª Teresa nos dice: “YO NO MUERO, ENTRO EN LA VIDA, EN LA VERDADERA VIDA”.

Gracias querida Hermana Mª Teresa, gracias por tu Testimonio de Amor y Servicio, gracias por haber sabido aportar con tu vida, tanta belleza a la Iglesia. Gracias por tú estela de luz, que hoy  ilumina nuestra vida.

Descansa junto a Jesús, bajo el amparo de nuestra Santísima Madre del Carmen.